La madre Teresa de Calcuta, siempre inquieta por el deseo de ayudar a curar las enfermedades de las personas que vivían en lugares apartados o que no contaban con los recursos para pagar los honorarios de un médico, llegó al TIBET, donde se comunicó con los monjes y maestros de ese zona. Éstos le entregaron unos TIBICOS, una clase de hongos, que tiene infinidad de propiedades curativas, con la única condición de que no se comercializaran, es decir que se debían de regalar .
Estos hongos tienen el aspecto de arroz, casi transparente. Los TIBICOS que se adhieren en el fondo del recipiente son los recién nacidos. Su forma de prepararse es la siguiente:
Los tibicos Se ponen en un colador de plástico y se lavan con agua purificada de temperatura ambiente en cada cambio; en recipiente de vidrio se coloca un poco de piloncillo y se vacían los tibicos ya lavados, se les agrega agua, se tapan con una tela de manta o una servilleta de papel para que tengan respiración.
Posteriormente, se colocan en un frasco de vidrio con aproximadamente de 2 tasas de tibicos, 2 a 3 tasas de agua purificada y un pedaso de piloncillo como del tamaño de un huevo de gallina.
Se dejan en reposo por un tiempo estimado de 72 horas; al dia siguiente se cuelan y el jugo que resultó (agua de tepache) se toma en ayunas y se vuelve a repetir todo el proceso
No debe endulzar ni agregarle nada extra y a medida que vayan aumentando los tibicos, se aumentan también las porciones de piloncillo y agua. Ya cuando tengas el doble de lo que necesitas comienza a regalar.
PROPIEDADES DE LOS TIBICOS
Articulaciones: Alivia reumas, Artritis, dolores musculares,extremidades y cintura.
Cabeza: Sana la migrana y los dolores de cabeza.
Hígado: Mejora sus funciones: quita problemas de vesícula,
Músculos: Alivia los hombros endurecidos y relaja la nuca, curan los dolores musculares
Obesidad: Da salud a los delgados y quema la grasa de los obesos.
Vida y edad: Hace la vida longeva y vital, evita achaques, hace menos bruscos los cambios en la monopausia.
Pulmones: Fortalece y cura la propensión a la bronquitis, quita la tos, decrece la flema y cura el asma.
Riñiones: Cura sus enfermedades, ayuda a orinar bien, disminuye la posibilidad de cálculos, en general ayuda al sistema urinario.
Sangre: Baja el colesterol, ablanda arterias y las venas endurecidas, baja la glucosa en caso de diabetes, disminuye la hipertensión y quita las hemorroides.
Estómago e intestinos: Evita el estreñimiento, ayuda a la digestión, cura los cálculos estomacales, cura la diarrea.
Nervios: Sana dolores nerviosos, herpes, insomnio y mareos.
Ojos: Rehabilita la potencia visual; desaparecen las cataratas.
Cabellos: Reafirma su color natural original, desaparecen canas y fortalece el cuero cabelludo.
Cáncer: Previene en algunos casos y cura el de la piel.
fuentes: